Presenta un color ámbar intenso con brillantes reflejos caoba.
En nariz, ofrece aromas punzantes y complejos, evocando la nuez característica.
En boca, es seco y persistente, con un sabor pronunciado a nuez que deja una grata impresión.
12-14 ºC
Ideal para acompañar carnes de caza, especialmente platos intensos y con carácter.
El Oloroso Bertola 12 Años es una joya del Marco de Jerez, un vino que encarna la tradición y la maestría de una de las regiones vinícolas más emblemáticas de España. Representa la expresión pura de la variedad Palomino Fino, cuidadosamente envejecida para ofrecer una experiencia sensorial profunda y memorable. Este vino no es solo una bebida, es un legado líquido, un testimonio de un proceso artesanal transmitido a lo largo de generaciones.
La historia de Diez Mérito es inseparable de la rica tierra y el clima único del Marco de Jerez. Esta bodega, arraigada en la tradición, ha dedicado su existencia a la producción de vinos que reflejan la identidad de esta Denominación de Origen Protegida. El Oloroso Bertola 12 Años nace en este terruño privilegiado, donde las condiciones geográficas y climáticas, combinadas con el saber hacer de sus gentes, permiten el desarrollo de uvas excepcionales y la crianza de vinos de calidad insuperable.
La Denominación de Origen Jerez-Xérès-Sherry es reconocida a nivel mundial por la singularidad de sus vinos. El suelo albariza, la brisa atlántica y el sol radiante crean el entorno perfecto para el cultivo de la Palomino Fino, la uva reina de la región. Cada sorbo de Oloroso Bertola 12 Años es un viaje a este rincón de Andalucía, una invitación a descubrir la esencia de un paisaje y una cultura.
El Oloroso Bertola 12 Años es un vino 100% Palomino Fino, una variedad que se adapta de maravilla a las condiciones del Marco de Jerez, dotando a los vinos de una estructura y un carácter distintivos. La clave de su complejidad y longevidad reside en el ancestral sistema de crianza de criaderas y soleras.
Este método, único en el mundo, consiste en un sistema de barricas dispuestas en diferentes niveles. Las botas más viejas, en la solera, contienen el vino más maduro. El vino se trasiega periódicamente de las botas de niveles superiores (criaderas) a los inferiores, y una parte del vino de la solera se embotella. Este proceso de crianza dinámica asegura una perfecta homogeneidad y una evolución constante del vino a lo largo del tiempo. En el caso del Oloroso Bertola 12 Años, esta crianza dinámica se prolonga por un periodo medio superior a los 12 años, permitiendo que el vino desarrolle una profunda complejidad aromática y gustativa.
La crianza oxidativa, característica de los vinos Olorosos, es fundamental en este proceso. El vino está en contacto con el aire dentro de la barrica, lo que fomenta el desarrollo de notas tostadas, a frutos secos y una estructura más robusta. El resultado es un vino con una personalidad marcada y una capacidad de guarda excepcional.
El Oloroso Bertola 12 Años es un vino con carácter, capaz de realzar una amplia variedad de platos y de acompañar ocasiones especiales. Su sequedad, su estructura y sus evocadoras notas a nuez lo convierten en un excelente compañero para aquellos momentos en los que buscamos un vino que aporte elegancia y profundidad a la experiencia culinaria.
Aunque su perfil seco y su complejidad aromática lo invitan a explorar diferentes combinaciones, es su afinidad con carnes de caza lo que más destaca. La intensidad y la riqueza de platos como un jabalí estofado o unas perdices a la cazadora encuentran en este Oloroso un contrapunto perfecto, equilibrando la untuosidad de la carne con la vibrante acidez del vino.
Para disfrutar del Oloroso Bertola 12 Años en su máximo esplendor, es importante conservarlo adecuadamente. Mantenga las botellas en un lugar fresco, oscuro y con una temperatura constante, idealmente entre 12 y 16 grados Celsius. Evite la exposición directa a la luz y las vibraciones, que pueden alterar la calidad del vino.
Una vez abierta la botella, el Oloroso Bertola 12 Años puede conservarse durante un tiempo limitado, si se toman las precauciones adecuadas. Una buena práctica es volver a tapar la botella con su corcho original o con un tapón hermético, y guardarla en la nevera. Su estructura y contenido alcohólico le confieren una cierta resistencia, permitiendo disfrutar de su complejidad durante algunos días tras su apertura, aunque siempre será preferible consumirlo lo antes posible para apreciar su frescura y sus aromas en su punto óptimo.