Presenta un color caoba intenso y brillante, con una lágrima densa que denota su crianza.
En nariz despliega aromas complejos de frutos secos tostados, almendras y un toque de especias.
En boca es seco, potente y con una persistencia notable, ofreciendo notas de nuez y madera.
12-14 ºC
Ideal para acompañar quesos curados, carnes rojas a la parrilla o guisos tradicionales.
Sumérjase en la rica tradición vinícola de Jerez con el Oloroso Pemartín, un vino que no solo seduce el paladar, sino que también cuenta una historia de excelencia y dedicación. Este Oloroso, con su carácter distintivo y su profundo legado, se erige como un embajador de uno de los estilos de vino más emblemáticos de España.
El Oloroso Pemartín es un tributo a la historia y la maestría de la bodega Diez Mérito. Sus raíces se hunden profundamente en el suelo de Jerez, cuna de vinos fortificados de renombre mundial. La crianza de este vino específico se remonta a las venerables bodegas de «José Pemartín & Cia.», fundadas nada menos que en 1810. Esta longevidad es un testimonio de la continuidad de la calidad y el saber hacer transmitido a través de generaciones. La DO Jerez-Xérès-Sherry, reconocida internacionalmente por sus condiciones únicas de terruño y clima, proporciona el escenario perfecto para que este vino desarrolle su complejidad y carácter inconfundibles.
La Denominación de Origen Jerez-Xérès-Sherry es un ecosistema privilegiado en el sur de España. Sus suelos blancos de albariza, la brisa marina del Atlántico y el sol intenso crean las condiciones ideales para el cultivo de la uva Palomino, la joya de la corona de esta región. Es aquí donde las viñas, bajo un cuidado meticuloso, dan vida a las uvas que darán forma al Oloroso Pemartín.
La esencia del Oloroso Pemartín reside en su pureza varietal y en un proceso de elaboración que honra la tradición. Este vino es un monovarietal, elaborado exclusivamente a partir de la noble uva Palomino. Esta variedad, autóctona de la región de Jerez, es conocida por su capacidad para producir vinos de gran estructura y potencial de envejecimiento.
La elaboración de este Oloroso comienza con la selección cuidadosa de las uvas Palomino. Una vez obtenida la base vínica, se procede a su encabezado con alcohol vínico hasta alcanzar los 18 grados de alcohol. Este paso es crucial para detener la fermentación y preservar el dulzor residual, sentando las bases para el posterior envejecimiento. La crianza se desarrolla bajo un sistema oxidativo en botas de roble americano, un método tradicional que permite la interacción controlada del vino con el oxígeno. Este proceso, que se extiende durante más de cinco años, es fundamental para la evolución del vino, confiriéndole sus características notas de frutos secos, especias y un perfil complejo y seductor. La elección del roble americano contribuye a la estructura y a la transmisión de sutiles matices aromáticos que enriquecen el perfil final del vino.
El Oloroso Pemartín es un vino que trasciende las ocasiones y se adapta a una amplia gama de momentos. Su complejidad y su carácter lo convierten en una opción fantástica para aquellos que buscan un vino con personalidad y profundidad. Es un compañero ideal para las sobremesas, donde su riqueza aromática puede ser plenamente apreciada en un ambiente de relajación y conversación. Su estructura y sus notas especiadas también lo hacen interesante para acompañar una variedad de propuestas culinarias, añadiendo un toque de sofisticación y distinción a cualquier comida.
Este Oloroso es una invitación a la celebración, ya sea un evento especial o una reunión íntima entre amigos. Su carácter festivo y su elegancia lo hacen perfecto para brindar y compartir momentos memorables. La versatilidad del Oloroso Pemartín permite disfrutarlo en diferentes contextos, desde una tarde de tertulia hasta una cena más formal, siempre aportando un valor añadido a la experiencia.
Para asegurar que el Oloroso Pemartín mantenga su calidad y carácter a lo largo del tiempo, es fundamental una correcta conservación. Las botellas deben almacenarse en un lugar fresco, oscuro y con una temperatura constante, idealmente entre 12 y 16 grados Celsius. La posición horizontal de la botella ayuda a mantener el corcho húmedo, garantizando un sellado óptimo y previniendo la oxidación prematura.
Aunque el Oloroso Pemartín ya se presenta en un estado de madurez espléndido, su estructura y su crianza oxidativa le otorgan un buen potencial de guarda. Con las condiciones adecuadas, este vino puede seguir evolucionando en botella, desarrollando matices aún más complejos y profundos. Es un vino que invita a ser descubierto y redescubierto, ofreciendo siempre una experiencia gratificante para el aficionado.